Historia de la aviación

La historia de la aviación: desde los primeros vuelos hasta la actualidad

El anhelo del hombre por volar comenzó tempranamente, cuando el hombre prehistórico contempló el vuelo de las aves. Nuestro deseo de volar está presente desde hace siglos y, a lo largo de la historia de la humanidad, hubo cientos de intentos por emular a los animales voladores, la mayoría de los cuales terminó trágicamente.

Pero entonces, ¿Cuál fue el primer avión de la historia? ¿Quién fue el primer ser humano en surcar los cielos? La historia de la aviación no solo es la historia de los aviones a los que estamos acostumbrados, sino que también es la evolución de un viejo anhelo de la humanidad, que ahora está entrando en otra etapa: los viajes espaciales.

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¿Qué nos deparará el futuro de la aviación?

Pero hoy, en Aviation 360, veremos la apasionante historia de la aviación y cómo fue que el deseo del hombre por imitar a las aves llevó a las aeronaves de hoy.

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Los orígenes de la aviación

Como dijimos, el origen de la aviación se remonta al hombre prehistórico, puntualmente a cuando éste levantó la vista y observó el vuelo de las aves, naciendo así su deseo de imitarlas. 

Hay registros de vuelos o intentos de vuelos de casi todas las épocas de la historia de la humanidad, e incluso se sabe que el vuelo se encuentra asociado a seres superiores en la mitología de varias culturas. Sin embargo, como ocurre con tantos otros hitos de la humanidad, tanto la fecha exacta como el pionero que logró por primera vez remontar vuelo a bordo de un vehículo más pesado que el aire está envuelto de polémicas.

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Han habido múltiples intentos de vuelo a lo largo de la historia de la aviación, pero ¿Cuál fue le primero?

A lo largo de la historia de la aviación han habido múltiples intentos por surcar los cielos, y a día de hoy se discute quién fue el primer hombre en alzar vuelo. 

Y es que, si bien toda persona informada diría que el primer vuelo en un aparato más pesado que el aire fue el de Orville y Wilbur Wright en su Flyer I, el 17 de diciembre de 1903 en Kitty Hawk (Carolina del Norte), existieron otros que levantaron vuelo antes que ellos, aunque sin tanto éxito.

Veamos entonces algunos de los más icónicos vuelos primitivos en la historia de la aviación.

Abbás Ibn Firnás: ¿el primer vuelo en la historia de la aviación?

Nacido en Ronda (Málaga, España) Abbás Ibn Firnás fue un proto-humanista, científico y químico andalusí nacido en una familia de origen bereber cuyos ancestros participaron probablemente en la conquista de la península ibérica, en la época del Emirato Omeya en al-Ándalus-España

Firnás fue también un pionero de la aviación y construyó el primer planeador de transporte humano, el cual tuvo un vuelo exitoso que lo convirtió en el primer ser humano de la historia en levantar vuelo, aunque con un final no muy alegre. Se dice que en el año 875 saltó desde un lugar elevado en Córdoba con unas alas de madera cubiertas de seda y plumas. Al parecer, planeó durante unos 10 segundos antes de caer y romperse las dos piernas. 

Hoy en día un cráter de la Luna, un aeropuerto en Irak​ y un puente en Córdoba (España) llevan su nombre, que fue latinizado posteriormente como Armen Firman.

Leonardo da Vinci: un adelantado a su tiempo

Tanto Abbás Ibn Firnás como muchos de sus sucesores pasaron por alto el hecho de que necesitaban una cola como la de los pájaros para aterrizar con éxito. Sin embargo, durante siglos el vuelo de las aves continuó inspirando a los pioneros tempranos de la historia de la aviación.

Así es como llegamos al más famoso de ellos: Leonardo da Vinci. El polímata florentino del Renacimiento italiano no necesita presentación y, si bien nunca llegó a levantar vuelo, fue Leonardo quien comprendió que los músculos humanos eran demasiado débiles para mover las alas y que se necesitaba una combinación del movimiento de brazos y piernas mediante poleas.

Fue así que construyó el Ornitóptero, un aerodino de alas móviles que obtiene el empuje necesario del movimiento batiente de sus alas de manera similar a como lo hacen las aves. Sin embargo, este jamás llegó a probarse, por lo que los aportes del gran polímata florentino a la historia de la aviación, aunque invaluables, fueron mayormente teóricos.

Los Hermanos Montgolfier y el globo aerostático

La historia de los aviones modernos tiene un antecedente casi inmediato en los globos aerostáticos. Es así que entran en la historia de la aviación los hermanos franceses Jaques y Joseph Montgolfier, inventores de esta máquina que desde finales del siglo XVII marcaría un antes y un después en el mundo de la aviación.

Como muchos de los grandes inventos de la humanidad, el globo aerostático fue descubierto casi por accidente, cuando Jaques y Joseph, hijos de un fabricante de papel, jugaban un día con bolsas de papel invertidas sobre el fuego, descubriendo que las bolsas subían hasta el techo.

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El globo aerostático, uno de los primeros antecedentes de la historia de los aviones

Así fue que el 4 de junio de 1783 llevaron a cabo su primera demostración pública en la que hicieron subir una bolsa esférica de lino forrada de papel llena de aire caliente de 11 metros de diámetro y un peso de unos 226 kilogramos. Recorrió 2 km en 10 minutos, alcanzando una altitud estimada entre 1600 y 2000 metros.

Pero los hermanos Montgolfier no se conformaron con esto, y el 19 de septiembre enviaron los primeros seres vivos (una oveja, un pato y un gallo) en una cesta enganchada al globo, para investigar los efectos del aire en altura. El hecho de que el mismo Luis XVI de Francia haya presenciado estas pruebas, con objeto de que el monarca diera su permiso para un siguiente ensayo de vuelo con humanos.

Así, el 21 de noviembre de 1783, Pilâtre de Rozier y el marqués d’Arlandes hicieron el primer vuelo tripulado por humanos en la historia de la aviación. Volaron durante 25 minutos a unos 100 metros sobre París, logrando una distancia de nueve kilómetros para aterrizar al sur de la ciudad, donde los primeros aeronautas fueron aclamados como héroes.

La historia de la aviación moderna

Hasta el siglo XIX fueron numerosos los intentos de construir máquinas voladoras que poco a poco fueron desprendiéndose del modelo de las aves. 

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¿Cuál fue el primer avión de la historia?

Fue así que algunos inventores se centraron solo en planear, controlando la dirección con el cuerpo. Es en este sentido que Otto Lilienthal fue uno de los ingenieros más influyentes en la historia de los aviones y, si bien no fue el padre del primer avión de la historia, si fue de alguna manera su precursor directo.

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Otto Lilienthal: el “abuelo” del primer avión de la historia

Otto Lilienthal fue un ingeniero y pionero de la aviación alemán que realizó importantes contribuciones al desarrollo de la aviación en la segunda mitad del siglo XIX. Lilienthal nació en Anklam, Alemania, en 1848 y desde joven mostró un gran interés por la ciencia y la tecnología.

A lo largo de su carrera, Lilienthal construyó y probó más de 2.000 planeadores diferentes, lo que le permitió desarrollar una gran experiencia y conocimiento en el campo de la aviación. En 1891, Lilienthal logró su primer vuelo en planeador, lo que le permitió demostrar que la aerodinámica era fundamental para el vuelo humano.

Lilienthal fue el primer hombre en volar con regularidad en planeadores, lo que le valió el título de «el padre de la aviación sin motor». Su trabajo inspiró a muchos otros pioneros de la aviación, incluyendo a los hermanos Wright, quienes se basaron en las investigaciones y experimentos de Lilienthal para construir su propio avión.

Desafortunadamente, en 1896, Lilienthal sufrió un accidente mientras volaba su planeador, lo que le causó graves lesiones que finalmente llevaron a su muerte. Sin embargo, su legado en el campo de la aviación sigue siendo reconocido hasta el día de hoy.

Pero quienes marcaron para siempre la historia de la aviación fueron los hermanos Wright, quienes ya son mundialmente conocidos como los creadores del primer avión de la historia.

Conozcamos un poco más sobre esta dupla de hermanos que cambiaron para siempre la historia de los aviones.

Los hermanos Wright: los padres del primer avión de la historia

Wilbur y Orville Wright nacieron en Ohio, Estados Unidos, en 1867 y 1871, respectivamente, y desde jóvenes mostraron un gran interés por la mecánica y la tecnología.

A lo largo de su carrera, los hermanos Wright realizaron una serie de experimentos y pruebas en aviones, lo que les permitió desarrollar una gran experiencia y conocimiento en el campo de la aviación. En 1903, lograron un hito histórico al realizar el primer vuelo controlado y sostenido en un avión en Kitty Hawk, Carolina del Norte.

El avión que utilizaron en ese vuelo fue el Flyer I, una máquina impresionante para la época. El Flyer I tenía un diseño innovador y estaba construido principalmente de madera y tela. Medía 6,4 metros de envergadura y pesaba alrededor de 340 kilogramos.

Los hermanos Wright y el primer avión de la historia
Los hermanos Wright y el primer avión de la historia

El motor del Flyer I era de cuatro cilindros y producía una potencia de alrededor de 12 caballos de fuerza. Este motor impulsaba dos hélices de madera contrarrotatorias, lo que permitía al avión mantener el equilibrio en el aire.

Sin embargo, como ocurre muchas veces a lo largo de la historia, los hermanos Wright fueron tratados al principio de geeks y de estafadores, por lo que nadie quería firmar ningún contrato de compra hasta no ver el avión funcionando. Los interesados creían al principio que todo era un fraude porque casi nadie los había visto volar y, además, la creencia común era que los hermanos eran unos geeks de la época con pocos amigos en los medios de comunicación.

Pero esto no detuvo a los Wright y, el 17 de diciembre de 1903, realizaron cuatro vuelos en el Flyer I. El primer vuelo duró sólo 12 segundos y recorrió una distancia de 36 metros pero, en el cuarto y último vuelo, Orville Wright logró volar durante 59 segundos y recorrer una distancia de 260 metros.

Este logro histórico marcó el comienzo de la aviación moderna y sentó las bases para el desarrollo de la aviación en todo el mundo. Los hermanos Wright continuaron realizando pruebas y mejoras en sus aviones y, en 1908, lograron realizar el primer vuelo controlado y sostenido en Europa.

Puede que el Flyer I sea un modelo de avión rudimentario que sería difícil de pilotar aun por los experimentados pilotos que existen en nuestros días, pero fue el primer avión de la historia que abrió el camino a lo que, muchos años después, serían los aviones que nosotros conocemos hoy en día.

Conclusión

En resumen, los hermanos Wright son considerados como los pioneros de la aviación moderna y su avión, el Flyer I, es un hito en la historia de la aviación. Su trabajo y experimentación en el campo de la aviación permitió el desarrollo de la industria aeronáutica y abrió las puertas a los viajes aéreos comerciales y la exploración del espacio.

Sin embargo, sin el trabajo de sus antecesores nada de esto hubiera sido posible. El deseo de volar está presente en el corazón de la humanidad desde hace miles de años, y fue este el punto de partida de la historia de la aviación, que no se reduce ni se detiene en la historia de los aviones.

Sin Abbás Ibn Firnás, sin Leonardo da Vinci ni los Hermanos Montfilger, y sin los invaluables aportes de Otto Lilienthal, los hermanos Wright no serían los padres de la aviación que conocemos hoy en día y, en este breve recorrido hemos tenido que pasar por alto otros grandes pioneros de la aviación que quizá no tengan la fama y el renombre de los Wright, pero cuyos aportes sin incalculablemente valiosos.

Por todo esto, conocer la historia de la aviación es conocer la historia de un viejo anhelo de la humanidad, que ha pasado de generación en generación y que aún hoy tiene mucho para ofrecerle a una humanidad que puede ver más allá del cielo.

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